Aumentan hospitalizaciones relacionadas con infecciones fúngicas durante la pandemia de COVID-19 en Estados Unidos: CDC
Por PF Staff
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Washington, DC. – En los Estados Unidos, las infecciones por hongos imponen costos de atención médica considerables (casi $6,700 millones en 2018) y causan enfermedades y muertes importantes (más de 7,000 muertes en 2021).
Los hongos que causan infecciones graves incluyen levaduras (Candida y Cryptococcus), mohos (Aspergillus) y los llamados hongos dimórficos (Blastomicosis, Coccidioides e Histoplasma).
COVID-19 ha surgido como un factor de riesgo importante para ciertas infecciones fúngicas, particularmente la enfermedad invasiva por moho, probablemente debido a los efectos adversos de COVID-19 en el sistema inmunológico y las terapias inmunosupresoras (corticosteroides) que a menudo se usan para tratar COVID-19 enfermedad.
Las muertes por infecciones de hongos aumentaron durante la pandemia de COVID-19. Debido a que los datos sobre las tasas de hospitalización por infecciones fúngicas y el uso de la atención médica pueden ayudar a la planificación de la salud pública y la práctica clínica, los investigadores analizaron una gran base de datos de servicios de atención médica para describir las tasas de hospitalizaciones relacionadas con infecciones fúngicas en los Estados Unidos.
La tasa de hospitalizaciones relacionadas con infecciones fúngicas (es decir, hospitalizaciones por hongos) aumentó un 8.5 % cada año durante 2019–2021.
Las tasas anuales promedio de hospitalización aumentaron significativamente para varios tipos de infecciones fúngicas, particularmente para ciertos mohos y levaduras.
Durante 2020-2021, las hospitalizaciones por hongos asociadas con COVID-19 tuvieron tasas de mortalidad hospitalaria más altas en comparación con las hospitalizaciones por hongos no asociadas con COVID-19 (48.5 % frente a 12.3 %), lo que subraya su importancia para la salud pública.
Para mejorar la preparación para los brotes de enfermedades infecciosas, incluida la pandemia de COVID-19 en evolución, se necesita una vigilancia integral de la salud pública para las enfermedades fúngicas para caracterizar la epidemiología de la enfermedad y guiar los esfuerzos de prevención en curso.