Por PF Staff
Planificar un herbario es sencillo y basta con elegir tus plantas favoritas y cultivarlas. Pero, para que todo sea más sencillo, una buena manera de empezar el jardín de hierbas es plantar primero las más conocidas y usadas. Eso sí, seleccionaremos las hierbas que prosperen en el clima del lugar donde vivimos y escogeremos cuidadosamente en qué tipo de maceta o cajón vamos a cultivarlas. Estudia bien factores como el sol, ya que cada planta necesita unos requisitos distintos, y colócalas en función de las necesidades de cada planta.
Lavanda
La lavanda es más que una planta medicinal que se caracteriza por sus propiedades calmantes. Además su aceite esencial es muy beneficioso para la salud.
Áloe vera
Aloe vera es una planta medicinal refrescante y cicatrizante, originaria del África tropical, donde se ha utilizado como antídoto del veneno en heridas de lanzas emponzoñadas.
Romero
El romero es una de las plantas medicinales más versátiles. Por ejemplo, tiene propiedades anti-inflamatorias, sirve para combatir la caspa y repele los mosquitos entre muchas otras.
Manzanilla
La manzanilla es nativa de Europa, Oriente Próximo y la India y se utiliza para desórdenes digestivos o nerviosos y para ungüentos antiinflamatorios.
Menta
La menta es una planta medicinal digestiva, analgésica y antiséptica. También constituye un excelente descongestionador nasal.
Caléndula
La caléndula es una de las hierbas medicinales más populares y versátiles. Se ha dicho tradicionalmente que levanta el ánimo.
Diente de león
El diente de león es una planta medicinal de la que se aprovechan hojas y raíz en remedios naturales como diurético, suave laxante y desintoxicante hepático.
Ortiga
La ortiga, una planta de lo más familiar y abundante, es una hierba medicinal rica en minerales y estimulante circulatoria.
Ajo
El ajo (allium sativum) es un potente antivírico inmunoestimulante que protege de infecciones.
Árnica
La árnica es el primer remedio cuando se ha producido un daño en la musculatura o las articulaciones, contusiones, distensiones o torceduras. Se puede utilizar tanto en crema como en aceite macerado o pomada.