¡Crece espiritualmente, veras que la vida se hace más fácil!
Por Sandra Gómez/Máster en Psicología
Todos los días ingerimos alimentos para nutrir nuestro cuerpo. Cuando pasamos muchas horas sin comer, usualmente se empieza a experimentar debilidad, un leve temblor del cuerpo y/o malestar generalizado.
Lo mismo pasa con nuestro ser, eso que está más allá de lo físico y que nos da la fuerza para vivir día a día. Usualmente las personas caen en un sin sentido, cuando solo se enfocan en lo físico.
Es necesario que alimente su área espiritual con lecturas, oración, reflexión, meditación, o de cualquier manera con la cual se sienta identificado. ¿Qué haces para nutrir tú espíritu? ¿Llevas a cabo alguna actividad diaria?
Quiero compartirles que hace ya varios años, hago una corta lectura antes de empezar mi día, porque me lleva a reflexionar y empezar mi jornada con energía. Leo libros o artículos que me ayudan a conectarme con lo profundo de mi ser. Estos días estoy leyendo un oracional que escribe mensualmente el Padre, Alberto Jose Lineros, dice así:
“Te propongo que hoy reflexionemos a partir de unos consejos de John Maxwell escribió para tener buenas relaciones con la persona que comparten su vida con nosotros. Primero: deje el pasado en el pasado. No es sano que a una persona se le recuerde constantemente lo que hizo mal, en el pasado. Cuando se ha resuelto un problema este no debe traerlo a colación en futuros problemas, eso reabre las heridas del pasado.
Segundo: pregúntate: ¿Es mi reacción parte del problema? Cuando es más grande que el lio, la reacción tiene que ver con algo aparte del problema. Los desencuentros empeoran cuando las reacciones son exageradas.
Tercero: recuerda que las acciones están más tiempo en los recuerdos que las palabras. Nadie recuerda todo el discurso de graduación de bachiller” (preparatoria)” o de la universidad.
Una persona casada tampoco puede recitar de memoria las palabras que le dijo a su pareja delante del sacerdote el día de la boda. Pero esas personas si recuerdan haber recibido su diploma de bachiller o de universidad, y también recuerdan haberse casado. La manera como tú tratas a la gente permanecerá con ellos mucho más tiempo que las palabras específicas que le dijiste.
Cuarto: nunca permitas que la situación importe más que la relación. Las relaciones se basan en el fortalecimiento de los vínculos.
Quinto: trata a tus seres queridos con amor incondicional. Cuando uno ama no critica, le corrige con palabras asertivas y busca la forma de acompañarlo en el proceso de transformación, sin importar el esfuerzo que se tenga que hacer “.