Se complican las pruebas COVID-19

Cerrado, martes y jueves.

Por Oscar Zepeda

Lo que hace pocos días era lo más fácil del mundo, ahora se ha convertido es toda una pesadilla si acude en los días que está cerrado.
Me refiero a hacerse una prueba para detectar el coronavirus, y precisamente, como dice el dicho: “Lo sé porque traigo los pelos de la burra en la mano”.
Ahí les va mi travesía, mis tres o cuatro lectores, y se las paso para que no tengan que vivir este tipo de contratiempos.
Resulta que un miembro de mi familia en edad escolar, tuvo un resfriado y tuve que reportar el caso a la escuela, por lo que les llamé a temprana hora, algo así más o menos.
“Ring, ring (así sonaba el teléfono de la escuela)

  • Llamo porque mi hija tiene resfriado, no tiene temperatura, sólo un dolor de garganta, ya le hicimos la prueba casera, salió negativo, y creo que estará lista para ir a escuela mañana.
  • La secretaria responde: Si tienen un dolor de garganta debe de hacerse la prueba Covid y traer la prueba de que no tiene coronavirus, porque la prueba casera no tiene validez, debe ser una prueba oficial.
  • Y yo: ok, tiene sentido, pues voy ahora mismo a hacerle la prueba y se la llevo más tarde (era jueves), no se diga más.
    Y así quedó la charla con la secre de la escuela, y ni tardo ni perezoso, me voy con todo y güerca (término norteño para decir niña) y ¡oh! Sorpresa, el lugar de pruebas de la Water y Sheridan en Waukegan estaba en total abandono.
    Ya no está abierta como era de costumbre de lunes a domingo, ahora sólo lunes, miércoles, viernes y sábado.
    Así que dije, pues me lanzo como bandido a un CVS o Walgreens y llevo la prueba a la “escul” para que no pierda muchas horas de clases (eran las 9:30 am).
    Llego a CVS y el farmacéutico me dice que hay que hacer cita por internet, y para no hacerles muy largo el asunto, no había citas de momento, las que había disponibles eran en 24 o 48 horas, lo mismo ocurrió en Walgreens.
    Por lo que me dije, pues vamos con su doctor y listo, ya fue mucha perdedera de tiempo, y luego de varios minutos tratando de comunicarme, me responden con la novedad de que hay que hacer cita y que no había para ese mismo día.
    Y como dicen Homero Simpson: “Maldita sea”, qué hago ahora, y cerca de la 1 de la tarde (salen a las 2:25) por fin me recomiendan ir a un centro de atención inmediata localizado en la Rollins y Grand en Gurnee, por cierto, se los recomiendo totalmente.
    Me dicen amablemente, “claro que podemos hacerle la prueba, sólo que tiene que esperar dos horas para que le toque su turno, y no se puede ir y regresar, debe de estar aquí”.
    “Sopas”, como dice mi compadre Chuy, pues a esperar y afortunadamente, una hora después nos llaman para la prueba y se lleva a cabo.
    Media hora más tarde nos dan el resultado oficial y con papelito de negativo.
    Por cierto, olvidé mencionarles que un día antes, la misma escuela le había practicado un test con resultado negativo, a lo que le sumamos otro en casa y uno más, el reciente, fueron tres prubas en 48 horas.
    Lo que hace hacer ahora, un simple resfriado, en fin, es parte del protocolo.
    Hasta la próxima y que tengan un excelente fin de semana.