Por Oscar Zepeda
Los vemos por todos lados en Waukegan, en las esquinas o cruceros más importantes, siempre con un letrero, malbestidos, con ropa visiblemente desgastada y sucia, algunos con barba y cabellera descuidada, pero siempre en silencio o mostrando que hay un problema social, son los vagabundos o “homeless” pidiendo dinero.
Pero qué hay atrás de estos personajes que causan lástima y que no siempre les damos un billete o una moneda para “vivir”, que es lo que todos creemos que pasa, pero en este caso, hay varios lados de la monera, y donde a final de cuentas, es nuestra decisión saber si los apoyamos o no.
En días pasados vi unas fotografías en redes sociales que denuncian a dos homeless terminando su jornada de trabajo, pedir limosna, y abordar sus vehículos, uno de ellos una camioneta tipo SUV Acura de reciente modelo, el otro, una camioneta pick up cabina y media, Chevy.
El primero de ellos (Acura) se sabe que no es muy barato que digamos, lo que nos hace suponer que hay personas vagabundas que ya se han acostumbrado a este tipo de actividad, obtener dinero fácil y no hacen mayor esfuerzo para ganar dinero, incluso, no pagan impuestos.
Por otra parte, hay personas que se dedican a este oficio que son excombatientes de guerras y que sufren de problemas mentales, drogadicción, alcoholismo y que simplemente lo han perdido todo, no tienen una dirección fija, por lo que carecen de formas de reincorporarse a la sociedad, pese a que son ciudadanos americanos.
Es por ello que la única opción es recurrir a tener lástima de la comunidad y pedir limosna en las esquinas, aun y cuando veamos que aún están fuertes, son jóvenes y a simple vista, pueden realizar algún tipo de trabajo.
Por otra parte, el alojamiento que solía albergar a estas personas en la calle Grand al parecer ya no está a su alcance, y ahora tienen que buscar formas para sobrevivir, no tienen techo y buscan cómo subsistir por sus propios medios, es por ello que los vemos por todos lados.
Al final, la decisión de apoyarlos o no, es nuestra, tardará mucho tiempo para que las autoridades, en todos sus niveles, logren hacer algo para evitar que mendiguen e inconformen a muchos automovilistas, pues no es un delito lo que hacen.
Así es mis queridos tres o cuatro lectores, al menos en Waukegan ellos seguirán con sus letreros y pidiendo dinero para subsistir, algunos lo harán por mera necesidad, mientas que otros, ya se les hizo fácil sacar dinero en esta forma y no pagar impuestos.
Hasta la próxima y que tenga un excelente fin de semana.