Por Oscar Zepeda

De por sí que la Concacaf tiene un nivel de juego mucho más bajo que el europeo o sudamericano, no hay punto de comparación, y ni así la selección mexicana puede ganar los partidos con facilidad.
Y digo esto, simplemente porque, en sí, México exporta una gran cantidad de jugadores, ahora más que en ninguna otra época, lo que lo pone como el equipo lleno de estrellitas y el equipo a vencer, y como diría el niño seguidor de Pumas: “No sirven pa’naaada”.
Si comparamos hombre por hombre a los jugadores del Tri con los de otra selección, veremos que a los mexicanos les pagan más, y esto significa que por cobrar más deben ser mejores en la cancha.
Pero estamos muy lejos de verlo de esta manera, la plaga de estrellitas que tiene la selección nacional está más preocupada en pintarse el pelo, hacerse cirugías porque se ven horribles, por bailar mejor lo que ellos consideran música y subirla a sus redes sociales, que olvidan el verdadero significado de ponerse la playera de la selección.
Vimos cómo sufrieron en Jamaica, que, aunque ganaron 1-2 a una selección muy humilde futbolísticamente hablando, la frustración de no ganar con facilidad fue por demás evidente.
Los vimos contra los ticos en el Azteca, un verdadero desastre, una cancha que ya no pesa, con una afición injustamente castigada que no puede asistir al estadio simplemente porque exige resultados, muy lejos de la echarle la culpa por el supuesto grito homofóbico que le está calando en los bolsillos a la federación con cada multa.
Esto sin mencionar las vergonzosas derrotas ante Estados Unidos y Canadá, en fin, las actuaciones del Tri estresan a la afición que la verdad, no sabemos si va a calificar al mundial de Catar.
No olvidemos que se logró la calificación al mundial de Rusia gracias a un favor del equipo de las barras y las estrellas, y en esta eliminatoria, aunque el equipo va en tercero, se pueden dar sorpresas, con ese tipo de juego de “ahí te va la pelota, pégale tú”, que esperamos no sucedan.
Y como todos tenemos esa ilusión de ver a nuestra selección en el mundial pues vamos a seguir viendo los juegos y poniéndonos la camiseta, claro, aquellos que la tienen y les gusta ponérsela durante el partido.
Pues ya saqué el “fuaaaa”, esperemos que las cosas cambien, que el Tata Martino entre en cordura y ya no se peleé con sus colegas entrenadores, porque demuestra la impotencia de no poder ganar, menos ganará si se lía a golpes.
Por lo pronto, no dejen de darse una vueltecita por el Expressway Amstutz y la Belvidere en Waukegan, donde se lleva a cabo la filmación de unas escenas de la serie Chicago Fire, en una de esas y nos tocan nuestros 5 segundos de fama.
Hasta la próxima y que tengan un excelente fin de semana.