Por Oscar Zepeda
Todo parece que se aproximan un par de alivios muy considerables para nuestra comunidad en general, principalmente en este mes de diciembre, el mes de la esperanza, los deseos, la unificación y la paz.
Por un lado, las grandes empresas farmacéuticas Moderna y Pfizer ya están en la etapa de que el gobierno de Trump les den luz verde para iniciar a distribución de la vacuna y empezar sus aplicaciones a finales de diciembre.
Quieren empezar con los más necesitados, personas mayores de edad y aquellos que tienen problemas de salud crónicas y que pueden ser duramente afectados si son atacados por el virus.
Y como mencionábamos en días pasados, la vacuna será gratuita y de fácil acceso para todos los norteamericanos, estén o no estén legalmente en el país, es para todos.
Ya dependerá de cada persona si se la quieren aplicar o no, aunque hay una garantía de efectividad superior al 95 por ciento, según aseguran las farmacéuticas y el mismo gobierno.
Y aunque muchos temen por los efectos secundarios, no hay de otra que correr el riesgo o sufrir las consecuencias si somos contagiados, ya sabemos que nos va como en feria y muchos ya han muerto.
Por otro lado, los legisladores en Washington presentaron un paquete económico para aliviar la economía a raíz de la pandemia del Coronavirus.
Le quieren inyectar 908 billones de dólares al país y que sea aprobado lo antes posible por el Senado y la Cámara de Representantes para que llegue a las familias necesitadas, pequeños negocios y otros, lo antes posible.
Incluye el seguro del desempleo de los $300, los $1,200 para los que declararon impuestos, otros $500 por cada dependiente.
Lo único que espera la población necesitada es que estos legisladores no se enfrasquen en sus desacuerdos, pleitos a los que están acostumbrados y que agilicen ese alivio económico.
Así que hay que ver si llega pronto Santa, mis queridos tres o cuatro lectores con la bolsa llena de lana, y principalmente, con la vacuna para ya salir de este maleficio.
Mientras tanto, ni se le ocurra pasar por la Grand Avenue y la Ruta 41 en Gurnee-Waukegan porque van a quitar el puente del ferrocarril y las filas y desviaciones van a estar desesperantes, así que llévesela tranquila, use calles alternas, como la Washington, Belvidere, Sunset, incluso la Pulaski.
Hasta la próxima y que tengan un excelente fin de semana.