Por PF Staff
Ingeniería vanguardista
En un pueblo se está construyendo una carretera. Un pueblerino se sentaba largas horas a ver cómo se realizaba la obra cuando se topó con el ingeniero.
– Hola, soy George Frank Steven, el ingeniero que hizo los estudios y encargado de la obra y la maquinaria.
– Hola, yo soy Federico Díaz, soy del pueblo de al lado.
– Veo que nunca habías visto cómo se hace una carretera moderna. Dime, ¿Cómo hacen las carreteras en tu pueblo?
– Bueno, en mi pueblo cuando queremos hacer una carretera de un pueblo a otro, soltamos un burro viejo y el animal escoge el camino más corto y más seguro, y por ese camino hacemos la carretera.
– ¿Y qué pasa si no tienen un burro?
– ¡Llamamos a un ingeniero!
Revisión médica
El doctor le pide una muestra de esperma a un hombre de 85 años como parte de su chequeo anual, le da un frasco y le dice:
-“Lleve este frasco a casa y tráigalo mañana con la muestra de esperma”.
Al día siguiente, el hombre de 85 años vuelve al consultorio del doctor y le entrega el frasco que se encontraba tan vacío y limpio como el día anterior.
El doctor le pregunta que pasó, por qué está vacío:
El viejito explica: “Primero intenté lograr el cometido con mi mano derecha, y nada.
Después traté con mi mano izquierda, y aún nada. Luego le pedí ayuda a mi esposa.
Ella trató con su mano derecha, después con su mano izquierda, y nada.
Ella dijo, ya sé cómo. Probó con su boca, primero con los diente puestos, después trato sin los dientes, y nada.
Vino mi cuñada y dijo: ¿a mí me van a enseñar? Probó un buen rato en posiciones distintas y cada vez más estrafalarias y no se pudo.
Incluso llamamos a Adelaida, la vecina de al lado, y ella también trató, primero con las dos manos, luego debajo del brazo y hasta apretando entre sus rodillas, pero nada.
El doctor estaba en estado de shock:
-¿Usted se lo pidió ayuda a su cuñada y a su vecina?
Y el viejo paciente contestó:
“Sí doctor… pero ninguno de nosotros pudo abrir el frasco…”