Por Oscar Zepeda
La clave no es tener el mejor planteamiento ni los mejores jugadores dentro del terreno de juego, mucho menos la mejor nómina, eso me quedó muy claro el pasado domingo mientras observaba el partido de la final de la Copa Oro 2021 desde el palco de prensa en el bello e impresionante estadio Allegiant en Las Vegas, Nevada.
Por cierto, un estadio techado que permite el desarrollo del juego, ya que las temperaturas desérticas de la ciudad, impiden jugar con el techo abierto.
Cerca de los 40C equivalente a los 104F para que tenga una idea más clara de lo que vivieron los paisanos, previo al encuentro, mientras disfrutaban de unas cheves y carne asada en el estacionamiento ondeando sus banderas tricolores, y también del equipo de las barras y las estrellas, obvio.
Más de 61 mil espectadores abarrotaron el escenario, en su mayoría mexicanos, lo que hacía que el equipo del vecino país del sur se sintiera como local.
Sin embargo, y volviendo al tema principal, no valió de nada la cartera de jugadores del Tata Martino, ante la persistencia y tenacidad de los jugadores de Estados Unidos.
A juego vertical y de balonazos largos, y sobre todo a nunca bajar la guardia, algunas veces carentes de técnica individual, pudieron aprovechar en tiempo extra anotar el gol de la victoria.
Fue impresionante ver a los miles de seguidores aztecas sufrir en los últimos segundos del encuentro, no daban crédito y apostaban a los penales.
El jugador abucheado del Tri, Titán Salcedo, que de titán no tiene nada, entra de emergencia por la lesión de Moreno, y de inmediato, el público le recrimina sus constantes errores.
Salcedo abandona el juego, por una supuesta lesión, aunque a muchos nos hizo pensar que no superó la presión del público y terminó desmoralizado. Esperemos que estas experiencias profesionales lo bajen de su nube de soberbia, lo mismo les pasa a otros, pero la noche del domingo pasado en Las Vegas fue un trago amargo, mis queridos tres o cuatro lectores.
Y hablando de malos momentos, el Tri olímpico termina el sueño de volver a portar una medalla de oro, al perder en la semifinal ante Brasil en penales (4-1), y ahora, tendrá que luchar por la de Bronce.
Japón será el próximo rival de la Selección Nacional de México Olímpica en el partido por el tercer lugar de Tokio 2020, luego de caer por marcador de 1-0 ante su similar de España.
El partido entre ambas selecciones será el próximo 6 de agosto en la cancha del Saitama Stadium a las 20:00 horas locales, 06:00 horas del Centro de México.
Así que a madrugar para apoyar al Tri por esa valiosa presea.
Hasta la próxima y que tenga un excelente fin de semana.