Por Oscar Zepeda
Mis queridos tres o cuatro lectores, el sueño guajiro de tener un cheque de 2 mil dólares en lugar de 600, se fue al bote de la basura luego de que los políticos en el Senado, encabezados por Mitch McConnel, rechazaran la propuesta de la Cámara de Representantes.
Era de esperarse, y es que el problema no es uno o dos políticos, el problema es que no se pueden poner de acuerdo en meses para negociar un buen paquete de estímulo económico, aún y cuando en sus narices ven la inmundicia en la que está el país.
Creo que deben de cambiarlos a todos, pero para eso hay que votar, mientras tanto pueda suceder, el problema sigue en las calles, millones de personas recurriendo a la comida y otros millones han sido contagiados por el Coronavirus.
Ellos, los políticos de ese rango, no se preocupan si les llega el cheque o no, tienen todo el poder del mundo para hacer y deshacer, pues no creo que ninguno tenga problemas económicos.
El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, rechazó el martes por la tarde una oferta demócrata para responder al llamado del presidente Donald Trump de aumentar los pagos directos por coronavirus a los estadounidenses, pero el destino final de la medida en la cámara controlada por el Partido Republicano no está claro.
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, demócrata por Nueva York, propuso aprobar el proyecto de ley por consentimiento unánime, lo que significaba que avanzaría si ningún otro senador se oponía. Pero McConnell se opuso rápidamente a la medida, que habría aumentado el tamaño de los cheques a $2,000 de $600 y empezarán a llegar desde el mismo martes en la noche para los que tienen depósito directo con el IRS.
Los demócratas presionaron para que McConnell celebrara una votación completa sobre la medida lo antes posible, pero McConnell fue vago sobre sus planes en declaraciones en el Senado. Señaló que Trump, quien había expresado su disgusto con el tamaño de los controles directos en el proyecto de ley de ayuda Covid-19 aprobada la semana pasada, ha pedido un mayor escrutinio de las elecciones de 2020 y la eliminación de las protecciones de responsabilidad de las principales empresas de tecnología, además del aumento pagos para los estadounidenses que luchan.
En otras palabras, estos personajes de Washington les vale tres cacahuates la situación económica y de salud del país, y prefieren seguir con el tema de las elecciones y la guerra.
Por lo pronto, eche sale en la entrada de su casa porque ya viene la nieve, maneje con precaución y siga protegiéndose del coronavirus, pues mientras no nos registremos para que nos apliquen la vacuna, el riesgo de contagio sigue al alza, como en la bolsa de valores.
Hasta la próxima y que tenga un excelente fin de año, nos vemos en dos semanas.